La jueza de Control y Garantías de Añatuya, Ana María González, extendió la detención de una mujer oriunda de Buenos Aires, que fue noticia nacional la semana pasada cuando se viralizó un video en el que se la vio golpeando a sus hijos.
Ahora está al límite de perder la patria potestad de los chicos, ya que al parecer también los habría quemado con cigarrillos y arrastrado por la casa.
En audiencia, la fiscal Alejandra Sobrero presentó la historia de la mujer de 25 años, quien fue aprehendida después de que un vecino la filmara mientras golpeaba con fiereza, a patadas, a los dos niños de uno y medio y otro de 5 años.
“Lesiones leves calificadas” son los cargos atribuidos a la detenida, quien fue apresada por efectivos de la Seccional 41, tras conocerse el contenido del video del vecino.
Ahora, las funcionarias ya recibieron las conclusiones de un informe socioambiental y el de los propios forenses, pero restan las evaluaciones psicológicas y psiquiátricas, trascendió. Prima facie, trascendió que la imputada maltrataba a los niños desde hace mucho tiempo. Entonces, lo del video sería apenas una pequeña muestra de la cotidianidad padecida. La protagonista vino hace pocos años de Buenos Aires y vive sola en Añatuya. En el día a día enfrentaba muchos problemas económicos, pero vanos fueron los intentos de sus vecinos, insistentes y perseverantes en tenderle una mano. Ello no era muestra de orgullo, sino terquedad y empecinamiento en exponer a sus hijos a una hambruna carente de sentido, de acuerdo con lo relatado a las asistentes sociales. Pero lo que más impactó en el recinto fueron los informes médicos.
Los profesionales habrían afirmado que los menores presentarían secuelas de viejas agresiones físicas, en especial el más pequeño, con heridas de quemaduras de cigarr i l l o s y lesiones propias de haber sido arrastrado por el piso. Ante lo evidente, las funcionarias coincidieron en que los niños precisan urgente contención de una familia ampliada, ya que así la imputada no puede regresar a su lado.
El presente y el futuro de los dos niños son delineados ahora por personal del Ministerio Pupilar. Con varias medidas pendientes y en tramitación, la magistrada dispuso la detención de la imputada por diez días. Cumplido ese tiempo, estarían listas las conclusiones de los informes psicológicos de la acusada. No es todo. La jueza y la fiscal trabajan tras estudios complejos y exhaustivos de los chiquitos, en procura de conocer si existen lesiones internas en el cuerpo y en la cabeza.